Bendito sea el campeonato con que soñamos,
Bendito cada nombre que ha sido designado,
Benditos los pibes que jugamos,
El peso de la historia, el respeto ganado,
Malditos sean los recuerdos dolorosos,
Maldita la impotencia y la injusticia que vivimos,
El volvernos a casa cada uno por su lado,
Las finales sin jugar… el quedar en el camino,
Bendita la anestesia general a los dolores,
Las tristezas que curamos con abrazos,
Las gargantas que se rompen por los goles,
El sentirnos los mejores por un rato,
Malditos los sorteos y los interzonales,
Los árbitros al azar que signaron nuestra suerte,
Malditos los mezquinos que juegan sin poesía,
Los que pegan, los que envidian, los que rompen y lastiman,
Bendito... Continuar leyendo